Son curiosas figuras que podemos encontrar en rincones de la ciudad. Casi todo el mundo ha oído hablar de la rana de la Universidad, de la que cuenta la leyenda que si la encuentras tendrás buena suerte en los estudios. Además, muchos conocen el extraño astronauta que podemos encontrar en la Catedral, donde también hay un dragón comiendo helado.
Pero además de estas conocidas figuras, esta magnífica ciudad te da otras muchas razones para pasar unos días disfrutando de ella. Por ello, vamos a enumerarte algunas de ellas.
- El jamón serrano y otras delicias gastronómicas.
El jamón de Guijuelo es una de las mayores delicias gastronómicas, así que no se puede visitar Salamanca y no probarlo. Otro de los manjares que no puedes perderte es el hornazo, ideal para degustar en cualquier momento del año.
- El ambiente estudiantil.
En Salamanca no importa que día sea, si lunes, miércoles o sábado, siempre encontrarás un bar donde pasar un buen rato, sobre todo, si se visita en época de estudios. Además, en Salamanca se pueden encontrar locales para todas las edades.
- El río Tormes.
Además, si echas de menos estar en la orilla del mar tomando el sol podrás acercarte a las orillas del río Tormes. Allí se puede caminar, jugar con los niños en los parques, montar en bici, dar un paseo en barca…
- El Puente Romano.
Es un lugar ideal para ver el atardecer en la ciudad, mientras el sol cae y se aprecia la piedra de las Catedrales de un color que hará que las vistas de la ciudad se conviertan en un recuerdo inolvidable.
- La universidad, la Tuna y el saber.
La Universidad de Salamanca cuenta con 800 años de historia. Por ella han pasado genios, buenos estudiantes y otros no tan buenos, pero dice el dicho que “El que quiera saber, que vaya a Salamanca”. Además, por la noche podrás encontarrte con los tunos, y disfrutar de sus canciones.
- Las leyendas y costumbres.
En la Cueva de Salamanca podrás descubrir dónde se practicaba la nigromancia y el Marqués de Villena perdió su sombra. Que te cuenten además la historia del Padre Putas y el Lunes de Aguas. Observa la torre de la Catedral, a la que todos los años se encarama sin protección el Mariquelo con su flauta y tamboril.
- Las dos estaciones.
En Salamanca, o es verano o es invierno. Pasamos del abrigo y las botas, a los tirantes y sandalias en menos de un mes.
Si quiere disfrutar de estas maravillas de Salamanca durante el próximo puente o en cualquier momento del año, reserva tu habitación a través de nuestros teléfonos 923 27 24 65 ó 674 490 356. Nos encontramos en pleno centro de Salamanca, a 65 metros de la Plaza Mayor.