Existen millones de leyendas repartidas por todo el mundo, historias en las que no sabemos qué hay de cierto. Además, si ya la historia empieza con un «me lo dijo un amigo», ¡tenemos los ingredientes básicos! Y, así comienza nuestra entrada de hoy: cuenta la leyenda…
En el número 6 de la calle Bordadores se levanta la Casa de las Muertes construida a principios del siglo XVI, pero ¿cuál es el origen de su terrorífico nombre? Se cree que se remonta al año 1467, cuando vivía en ella una bella joven llamada Elvira Manzano. El problema principal es que en Salamanca por entonces hay una lucha de bandos nobiliarios: los Monroy y los Manzano. Elvira pertenece al bando de los Manzano y don Diego, un joven poco acostumbrado a no tener lo que deseaba y se había enamorado de la joven, al de los Monroy.
Aunque podáis pensar que se trata de una réplica de la historia de Romeo y Julieta a la española, ¡os equivocáis! Elvira no le correspondía. Es por ese motivo que Don Diego planea secuestrarla con la ayuda de dos de sus soldados: Tello e Íñigo, que a su vez consiguen la ayuda de Altamirano, sirviente de la casa de los Manzano.
La noche de autos, el fiel Altamirano confiesa a su joven señora los planes de don Diego y Elvira decide fingir su muerte. Cuando Don Diego la ve cree, cae de rodillas envuelto en llanto y culpa. Mientras tanto, el Altamirano había conducido a los soldados por una escalera de caracol haciéndolos creer que los llevaba a un aposento lleno de riquezas. Sin embargo, su destino era el lugar en el que estaban enterrados los cadáveres de los hermanos de Elvira, muertos a manos de doña María la Brava que los decapitó sin piedad para vengar a su vez la muerte de sus hijos.
Lo siguiente que se sabe de Don Diego dedicó el resto de sus días a la vida religiosa. De Tello e Íñigo no ha vuelto a saberse nada, hasta que con motivo de unas excavaciones para reconstruir la casa aparecieron entre rocas cuatro cadáveres: los de Tello, Íñigo, y los de los dos jóvenes Manzano. Algo que horrorizó a los salmantinos que la apodaron con este nombre.
¿Os atrevéis a visitar esta casa? No os preocupéis porque la noche podéis pasarla con nosotros en Salamanca Suite Studios.
¡Feliz fin de semana!